La cirugía de nariz o rinoplastia, es un procedimiento quirúrgico de tipo estético que se realiza a personas en buen estado de salud con interés en modificar la forma o tamaño de su nariz para darle mayor armonía a su rostro corrigiendo problemas de simetría, o bien, a quienes tienen problemas respiratorios a causa de la forma de su nariz.
Anteriormente en este blog hemos dedicado varias publicaciones a hablar de la manera en que se lleva a cabo la cirugía y presentamos los beneficios que ofrece este tipo de operación a nivel estético y correctivo, pero en esta ocasión nos enfocaremos al proceso de recuperación tras una rinoplastia y abordaremos los efectos secundarios que por lo regular la acompañan, los que desaparecen al cabo de unas semanas si se siguen al pie de la letra las recomendaciones médicas durante este proceso.
Antes de tomar la decisión de someterse a una cirugía de nariz, el cirujano platica con el paciente los pormenores de la operación, que incluyen información sobre las técnicas quirúrgicas a emplear, los riesgos del procedimiento, las expectativas realistas que se pueden tener del mismo y los efectos secundarios de la rinoplastia, así como del tipo de cuidados que se deben tener durante el proceso postoperatorio y de recuperación. Cabe resaltar que cada caso es diferente, por esta razón, aunque los efectos secundarios y cuidados recomendados que presentemos aquí son los más comunes, es posible que alguna persona manifieste diferentes síntomas o que el cirujano indique pautas distintas a las mencionadas, así que no te olvides de consultar a tu médico ante cualquier duda que te surja, ello te permitirá tomar una decisión bien informada y garantizar una recuperación exitosa tras la operación.
Toda persona que se somete a cualquier tipo de cirugía estética espera tener los resultados que imaginó en el menor tiempo posible. Sin embargo, todas las operaciones tienen efectos secundarios de una duración variable y los especialistas recomiendan, ante todo, tener mucha paciencia para poder disfrutar de los beneficios de la operación sin sentir mucha ansiedad o inseguridad sobre los resultados. Lo primero a lo que se enfrentará una persona que ha operado su nariz es dolor después de la cirugía, el dolor es un síntoma completamente normal que se debe a las alteraciones que sufren las estructuras de la nariz durante la operación. En la rinoplastia, partes que le dan forma a la nariz, como el hueso y el cartílago se modifican y la reacción natural del cuerpo es enviar una señal de dolor. Esto no es algo que deba preocuparte demasiado si estás pensando someterte a un procedimiento quirúrgico para cambiar la forma o tamaño de tu nariz, pues es fácilmente controlable con analgésicos de venta libre. Sin embargo, es importante tener en cuenta que a pesar de que la mayoría de los pacientes puedan sentir alivio al dolor con analgésicos o soportarlo bastante bien, en algunos casos el dolor puede ser más fuerte, para lo que el especialista tendrá que recetar medicamentos más fuertes. Generalmente sólo durante las primeras 24 horas después de la operación se presenta un dolor intenso, aunque durante algunas semanas se pueden experimentar ligeras molestias y una sensación de falta de aire.
Otro síntoma que presentan los pacientes de rinoplastia después de la operación es la inflamación de la nariz y el área alrededor de los ojos. Durante la primera semana la inflamación es muy evidente, pero poco a poco comienza a desaparecer hasta ser muy ligera. Esta inflamación también tiene una explicación natural, que la hace un síntoma muy normal y es que los tejidos de la zona, al ser remoldeados, pasan por un proceso de cicatrización necesario para adaptarse a la nueva forma y es precisamente eso lo que produce una inflamación. Si bien este síntoma desaparece por sí solo, es posible que durante los primeros seis meses después de la cirugía se presente una ligera inflamación que únicamente será percibida por ti y tu cirujano. Además del dolor y la inflamación, los moretones son considerados un efecto secundario normal tras una rinoplastia. Los moretones por lo regular aparecen alrededor de los ojos y, tanto su intensidad como su tamaño, varían de una persona a otra. Estos, al igual que los otros síntomas, desaparecen solos y después de diez días el rostro tendría que estar libre de estas marcas.
En lo referente a los cuidados después de una operación de nariz, los especialistas recomiendan guardar reposo en cama durante las primeras 24 horas, la cabeza se debe mantener elevada, lo que contribuye a aliviar el dolor y la inflamación, en este período de tiempo es normal sentir la cara hinchada, así como dolor de nariz y de cabeza, para lo que se prescriben algunos medicamentos que ayudarán a aliviar las molestias. En los primeros días se presenta sangrado de nariz y para evitar complicaciones que puedan derivar en una hemorragia o una mala cicatrización se deben evitar, al menos durante una semana, actividades que incrementen la presión sobre la nariz, por esto el médico indica no sonarse la nariz, no inclinar la cabeza a menor altura que la del corazón y no realizar actividades físicas que incrementen el flujo sanguíneo. Para reducir la inflamación y moretones, puede recomendarse la aplicación de compresas frías y en general existirán restricciones sobre el tipo de actividades que pueden realizarse.
Como ya mencionamos, dado que cada caso es diferente, las instrucciones específicas proporcionadas por el cirujano varían de una persona a otra, pero en cualquier situación en que se presente un sangrado excesivo, fiebre, dolor insoportable o alguna anomalía en la cicatrización, se debe acudir de inmediato al consultorio para que el especialista indique las medidas a adoptar.
Por lo regular, cuando los síntomas de efectos secundarios hayan disminuido en intensidad, el médico indica la reincorporación a las actividades normales. La mayoría de las personas pueden trabajar una semana después de la operación si esto no implica grandes esfuerzos físicos, para realizar actividades deportivas y levantar objetos pesados es necesario esperar al menos dos semanas y durante las primeras ocho semanas se recomienda evitar actividades que impliquen un riesgo de sufrir golpes en la nariz. Las personas que utilizan anteojos deben considerar antes de la operación la opción de usar lentes de contacto, pues tendrán que transcurrir al menos seis semanas antes de que puedan volver a usarlos normalmente, o bien, pueden buscar alternativas como apoyarlos sobre los pómulos o la frente.
Esperamos que esta información te sea de utilidad. Recuerda que en ORL y Cirugía Facial contamos con un equipo de expertos especialistas en otorrinolaringología y cirugía estética facial dispuestos a ofrecerte un servicio y atención de primera categoría. Si tienes interés en someterte a una cirugía de nariz con fines estéticos o correctivos, no dudes en ponerte en contacto con nosotros para agendar una cita, con gusto te atenderemos.