La cirugía de nariz, también llamada rinoplastia, es el procedimiento estético facial que más se realiza, ya que en la cuestión estética puede marcar una profunda diferencia, no sólo en el equilibrio de los rasgos faciales sino también en la autoestima de la persona que se lo realiza. También suele hacerse por motivos funcionales cuando existe una malformación o un problema, ya sea congénito o traumatológico que afecte o limite la respiración.
Por ello es que el objetivo de la rinoplastia es remodelar la nariz, con mayor frecuencia por motivos estéticos. Para ser candidato a esta intervención quirúrgica se deben cumplir algunos requisitos; en primer lugar, se debe ser mayor de quince años, esto porque es la edad en la que el hueso nasal ha madurado por completo y la forma de la nariz se ha estabilizado, por lo que los resultados de la cirugía no se alterarán con el tiempo.
También deben tener una expectativa realista respecto a la cirugía, para indicarle al cirujano cómo es que esperan lucir después de la rinoplastia. Durante la intervención se puede anchar o adelgazar la nariz, modificar la punta e incluso aumentar o disminuir el tamaño de los orificios nasales.
¿Cómo se lleva a cabo la cirugía?
La cirugía de nariz es un procedimiento ambulatorio, es decir que no requiere de una hospitalización. Antes de que se lleve a cabo existe un proceso de preparación, donde el médico especialista que realizará la cirugía les explicará lo que va a realizarse y el procedimiento que debe llevarse a cabo después de la intervención. Una vez que hayan entendido todo, pasarán al área quirúrgica.
A pesar de que es un procedimiento ambulatorio, ustedes estarán sedados totalmente todo el tiempo. La cirugía inicia cundo el cirujano realiza una incisión, ya sea dentro de la nariz o a través de la piel que separa las fosas nasales, para que el cartílago y el hueso que forman la estructura de la nariz queden expuestos y se puedan esculpir o crear la forma y el perfil deseados. Una vez que el cirujano concluye este proceso, sutura la piel para fijarla en su lugar y así termina la cirugía, la cual por lo general demora de una a dos horas.
Cuando termina el procedimiento, es posible que se sientan molestias en el rostro o incluso un poco de dolor, pero este es disminuido con los analgésicos que le proporcionará el médico. Durante los primeros días la inflamación y los hematomas que pueden formarse, aumentarán, para reducir la inflamación se pueden aplicar compresas frías envueltas en una toalla o tela gruesa alrededor de la nariz. También, de ser necesario, el médico les recetará antiinflamatorios para acelerar la recuperación.
Después de una o dos semanas, la inflamación y los hematomas habrán desaparecido por completo y podrán notarse los resultados de la cirugía, aunque la recuperación total puede tardar aún más tiempo. También deberán acudir a una revisión después de un par de meses para que se descarte cualquier afectación en las fosas nasales o los vasos sanguíneos que requieran una segunda intervención.
Razones para realizarse la cirugía
La rinoplastia busca remodelar o moldear las diferentes partes de la nariz a través de incisiones que se pueden ocultar. Por lo que, principalmente, se realiza con el fin de mejorar la apariencia estética de la nariz. Aunque esto es muy general, por lo que a continuación les diremos las razones principales por las que deberías realizarse una cirugía de nariz:
- Reducir o aumentar. Como hemos mencionado, esta es la razón principal puesto que muchas personas no se sienten conformes con la forma o el tamaño de su nariz. Aunque la gran mayoría de las cirugías se realizan para reducir el tamaño, ya que son pocas las personas que requieren se vean más grande.
- Cambiar la forma. Una nariz aguileña, una fosa nasal más grande, una desviación en la punta y cualquier otra deformidad en la punta o el caballete pueden ser corregidas de manera precisa con la rinoplastia. Algunas de estas cirugías pueden hacerse sólo con anestesia local y no totalmente sedado, ya que son menos invasivas.
- Reducir la abertura. Muchas personas suelen tener fosas nasales demasiado grandes en proporción a su nariz y al contorno del rostro. Esto puede ser arreglado con una cirugía que dejará cicatrices apenas visibles.
- Corregir una lesión. En caso de una lesión traumática que haya afectado la forma de la nariz, lo más común es la desviación del tabique, y se realiza una rinoplastia para corregir la lesión y devolver el aspecto natural de la nariz. En ocasiones, si la lesión es menor se puede realizar en el consultorio, sin necesidad de entrar a una sala de operaciones.
- Problemas respiratorios. En caso de lesiones traumáticas o por deformaciones o padecimientos congénitos, como el labio leporino o el paladar hendido, las fosas nasales pueden ser más pequeñas o estar obstruidas por parte del hueso del paladar o por el tabique. Esto impide un adecuado flujo del aire lo que conlleva a problemas respiratorios, en estos casos la cirugía de nariz se hace con fines funcionales y no con fines estéticos, aunque pueden combinarse ambos.
Ahora que ya conocen más sobre la rinoplastia y las razones de porqué realizarse una, acudan con un médico especialista para que evalúen qué cambios pueden realizarle a su nariz y qué tipo de intervención requieren. Los mejores cirujanos especializados en la nariz, los oídos y la garganta los encontrarán en ORL y Cirugía facial.
Nuestros especialistas médicos manejan cada caso quirúrgico en conjunto con otros especialistas para conseguir el mejor diagnóstico, plan y manejo, ya que un procedimiento integral asegura que los pacientes no se encontrarán solos durante el seguimiento y tratamiento, contando con la mejor disposición de los médicos especialistas.
Para agendar una cita para una cirugía de nariz, los invitamos a comunicarse con nosotros vía telefónica para remitirlos a uno de nuestros consultorios en la Ciudad de México o en León, Guanajuato. También pueden contactarnos a través del formulario de nuestro sitio web y comunicarnos sus dudas y preguntas acerca de nuestros procedimientos, con gusto les responderemos.